La construcción de la Catedral de Málaga comenzó en el año 1528 y ocupó todo un siglo. Se comenzó por la cabecera, llegándose hasta el crucero. Y aunque las obras estuvieron paradas durante casi otro siglo más, ya podía celebrarse culto en ella, ya que fue tapiada por el crucero.

El encargado de la para continuar las obras fue a cargo del José de Bada. Se construye desde la fachada principal hasta la cabecera, siendo esta parte nueva la más rica en lo que a decoración se refiere. No obstante, el arquitecto mantiene el estilo y los planes antiguos. Las obras comienzan por la fachada principal, para enlazar con la parte antigua. En el año 1764 se unía la obra nueva con la vieja, derribándose el muro que cerraba el crucero.

Quedó sin terminar una torre, existen dos versiones para esto, la primera es que el dinero que había para ello se dio para el arreglo de los Caminos de Antequera y Vélez, tan mal comunicados por aquél entonces. Una segunda versión más romántica, pero sin verificar a día de hoy, es que el dinero dispuesto para la construcción de esa torre fue enviado como apoyo para la guerra de la independencia norteamericana.